AYER SÁBADO SE CUMPLIERON 47 AÑOS DE LA GRAN DERROTA DE ESTADOS UNIDOS EN VIETNAM
La guerra de Estados Unidos contra Vietnam quedó resumida, como el punto máximo de heroicidad de un pueblo de aldeanos campesinos sobre una potencia militar que se creía invensible.
La caída de Saigón supuso el inicio de un período de transición para Vietnam que estableció un Gobierno Provisional Revolucionario dirigido por el héroe Ho Chi Minh que se dió a la tarea de unificar el país.
Vietnam debió reconstruirse desde las ruinas. Solo Vietnam del Norte sufrió la destrucción del 70 por ciento de su infraestructura; quedaron reducidas a escombros escuelas, viviendas, universidades, fábricas, hospitales.
En el antiguo Vietnam del Sur las consecuencias recayeron sobre el suelo, donde los norteamericanos experimentaron de manera terrorista, una guerra no convencional impulsada por el uso de agentes químicos, con la utilización,, de manera combinada, defoliantes y herbicidas, obligando a la población rural a desplazarse del Delta del Mekong hacia las ciudades.
Vietnam sufrió en su territorio 14 millones de toneladas de bombas, 50.000 toneladas de defoliantes, 250.000 toneladas de napalm. En cuanto a las víctimas humanas, para 1975, el número total estimado fue de 250.000 soldados survietnamitas y un millón de soldados norvietnamitas y del Frente Nacional de Liberación, y más de dos millones de civiles.
Hoy, la República Socialista de Vietnam vive en paz, integrados a un mundo que no le hace fácil la tarea por convertirse en una potencia social, agrícola, industrial; con una democracia revolucionaria, directa y participativa.

